En licuado, con café o té, la leche combina con todo. Además, es un alimento nutritivo y que quita el hambre. Pero, ¿cuál es su efecto en los riñones? No te quedes con la duda, aquí lo revelamos.
Desde hace algunos años, en torno a la leche de vaca, existe un debate. Hay quienes afirman que es el “alimento casi perfecto”, otros, que su ingesta debería sustituirse por opciones vegetales. Lo cierto es que los lácteos son la piedra angular de la dieta, pero, ¿cómo afecta la leche a los riñones?
A través de cada bocado, nuestro organismo activa o altera alguna de sus funciones. En el caso de la leche, su impacto no solo se encuentra en los huesos. De acuerdo al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación de España, esta bebida tiene proteínas de alto valor, lípidos, yodo, calcio, fósforo, vitamina A, B12 y riboflavina.
Sin duda, constituye la alternativa más completa para la formación de huesos y dientes. Sin embargo, ¿qué pasa cuando se sigue consumiendo en la edad adulta?, o ¿cómo afecta a los riñones si se tiene diabetes?
Foto iStock
¿Qué es lo más dañino para los riñones?
Los riñones son esos órganos que se encuentran en el abdomen, encargados de eliminar los desperdicios de la sangre y el exceso de agua por medio de la orina. También contribuyen a mantener el equilibrio de químicos en el cuerpo: sodio, potasio y calcio.
Aunque están preparados para resistir el embate de lo que ingerimos, hay cosas que en verdad los dañan. La principal es el consumo innecesario de proteínas, lo que fuerza a los riñones a trabajar más.
Lo anterior no significa que se deba dejar de consumir proteínas, solo es encontrar un equilibrio entre las de origen vegetal y animal, indican los Centers for Disease Control and Prevention.
¿Qué le hace la leche a los riñones?
La leche como tal no es mala para los riñones, excepto cuando existen las siguientes condiciones. Este lácteo tiene un impacto directo en estos órganos debido a su proteína. Por ello, puede causar algún daño en la función renal cuando:
1-La ingesta de leche es excesiva. En los primeros años de vida de un ser humano es elevada, de 2 a tres raciones diarias. No obstante, con el paso del tiempo, dicha necesidad va disminuyendo considerablemente.
2-La dieta es poco balanceada. Se cree que un vaso de leche es un sustituto del desayuno, pero no es así. Además, si se consume mucha carne o frutos secos, la cantidad de proteínas que ingresan al cuerpo se vuelve excesiva.
3-Enfermedades crónicas. En padecimientos como la diabetes o el síndrome de leche, es preferible consumir lo mínimo o nada de leche, ya que puede haber una pérdida de las funciones renales.
¿Cuál es la mejor bebida para los riñones?
Quizás resulte obvio, pero no todos consumen los ocho vasos de agua recomendados. Si el agua simple no es de tu agrado, un artículo de la Cleveland Clinic indica que el agua con limón es una manera de incentivar la ingesta de este líquido que ayuda a estos órganos a limpiarse.
¿Qué se siente cuando los riñones están fallando?
La diabetes, la hipertensión o la enfermedad renal crónica a largo plazo pueden hacer que los riñones pierdan la capacidad de realizar su labor correctamente. Si experimentas varios de los siguientes síntomas, acude de inmediato al médico:
- Piel seca
- Cansancio
- Dolor de cabeza
- Pérdida de apetito
- Náuseas
- Espasmos musculares
- Problemas de concentración y para dormir
No se trata de satanizar ningún alimento, todos tienen diversos beneficios para la salud. Simplemente, debes conocer mejor tus necesidades y mantener una dieta más equilibrada.
Con información de Excelsior
